La contaminación del Río Lurín

Cuando era niño pasaba por el río Lurín con sus aguas limpias, mirando como nadaban los peces y la gente buscaba camarones. Como todo río de la costa peruana, sus caudal aminora de Abril a Noviembre, y Diciembre a Marzo aumenta, en épocas excepcionales como cuando se pronuncia el fenómeno del Niño o de la Niña pueden existir aumentos considerables por la lluvia en la sierra.

A  propósito de estos fenomenos recuerdo bien el del año 82 y 83 que afectó tremendamente las zonas ribereñas destruyendo e inundando cultivos, granjas, casas, las perdidas fueron considerables. Aproximadamente en el año 97 atacó una sequía que redujo el caudal anual del río Lurín a valores mínimos, los meses de lluvia en la sierra no llegaron a los meses acostumbrados y los pozos subterráneos bajaron su nivel.

Actualmente, la expansión de la ciudad de Lima ha alcanzado las riveras del río Lurín, especialmente la zona de Pachacamac, Cieneguilla, todo esto a contribuido a deteriorar el ambiente de la cuenca baja del río Lurín. El crecimiento poblacional trae consigo una gran cantidad de residuos de su actividad diaria tanto domésticos, personales, industriales. Las riberas fueron usadas como zonas depósitos de desmonte y basura por pobladores de las cercanías, pero sobre todo muchos traen sus desechos a verterlos aqui, en camionetas, camiones; las políticas de limpieza de las municipalidades no definen la limpieza ni el cuidado del área.



En los últimos 3 años aproximadamente, la destrucción provino del mismo estado, propiamente deicho de parte de Sedapal, que bajo la consigna de vertido de aguas tratadas en el cauce del río simplemente iban a darle agua a un río seco. Actualmente esta parte de la cuenca que ocupa Pachacámac y Lurín es una zona pestilente donde se vierten miles de litros diarios de desagües sin tratar que contamina el ambiente de una manera escandalosa, el aire con un olor pestilente, los terrenos del cauce completamente inundados del desagüe y probablemente las filtraciones esten por ocupar la napa freática sin que alguna autoridad tome en cuenta este problema.

El mismo problema que destruyó los cauces de los ríos Rimac y Chillón actualmente alcanzó al río Lurín, el que estaba considerado como el ultimo valle verde de Lima, esta destruído por la inoperancia de las autoridades y los técnicos del estado, es posible observar esta destrucción de la naturaleza en el puente Lurín y alrededores; en los antiguos cauces que llevaban agua del río a las chacras cercanas al propio pueblo de Lurín que ahora llevan desechos y aguas negras.

Aún no es tarde para parar este problema de contaminación, pero sin las personas adecuadas en las entidades encargadas, poco se puede hacer; en el el año 2015 se celebró una cumbre del Ambiente del Perú (COP 21) se la pasaron hablando del cambio climático, sin embargo, ¿Como pueden detener el cambio climático si no pueden detener la propia contaminación?¿Que esperan para ejecutar alternativas para aminorar los impactos de los desechos?¿Algún día dejarán de ser solo unos cuantos enterados de esas iniciativas y empezarán a educar a los pobladores?

La zona de puquiales, y el río de desagües, estos puquios son usados por pobladores para lavar ropa.

Vertido del desagüe en el cauce del río Lurín